Tener tu primer periodo puede generar dudas, vergüenza o miedo. Por eso es clave hablarlo con naturalidad.

Para adolescentes:

  • No estás sola, es completamente normal.

  • Puedes elegir entre toallas, calzones menstruales, copas o discos.

  • Si sientes dolor, habla con un adulto.

Para mamás:

  • Escucha sin juzgar.

  • Explica con cariño cómo funciona el cuerpo.

  • Ofrece opciones que no impliquen miedo ni vergüenza.

Acompañar bien este proceso crea una relación sana con el cuerpo desde el inicio. Incluir calzones menstruales como una opción accesible y amigable puede marcar la diferencia en la experiencia de una niña o adolescente. También es útil enseñarles a combinarlos con otros productos como la copa o el disco menstrual para sentirse aún más seguras y protegidas.

 

Sergio De la torre